diciembre 31, 2007

AMOR A DESTIEMPO

Faltando cuatro meses para cumplir sesenta años
por quinta vez
me enamore

De todas ellas
solo Liz y Marina
supieron de mi amor

La primera
de cuyo nombre no me acuerdo
hasta su fisonomía el tiempo borro

A Carolina
por escrito le dije mi amor
sin nunca mandar la carta

Acabo de conocer a Ada
fallecida a los cuarenta y cinco años
cuando yo había cumplido o iba a cumplir doce

Amor a primera vista
amor de hoy y ayer
amor en tiempos virtuales

Seis años mas tarde
quería haber cumplido mis dieciocho
en la Barcelona libertaria del treinta y seis

Parte profundamente íntima de mi ser y ausencia al mundo
esta irremediable carencia
me ha acompañado a lo largo de toda mi vida

Hasta el día de hoy
en que se llena minimamente
al tiempo que se ahonda

Soñando con haber podido
entonces
encontrarme con Ada




Conocí a Ada Marti a través de la "Federación Estudiantil de Conciencias Libres"(*)… Para mí, tres rasgos caracterizaban principalmente la personalidad de Ada.

La pasión intelectual. No se conformaba con una visión inmediata de las cosas, tenia necesidad de profundizar en cualquier tema, aunque a veces ella misma se lamentaba de lo complicadas que eran las cosas. No se cansaba de estudiar y proyectar lo que estudiaba en todos los aspectos posibles. En este sentido, aprendí de ella a no aceptar espontáneamente las apariencias de la realidad, los prejuicios y las rutinas, aprendí a buscarle a todo su sentido mas profundo, aunque a veces cueste mucho y no le guste a los demás.

La generosidad de ánimo, la capacidad de dar y darse. Me basta recordar las horas que empleo conmigo, que ella en definitiva perdió para que yo las ganara y tuviera el privilegio de conocer cosas que sin ella no hubiera alcanzado. Pensaba menos en ella que en los demás, y esto a pesar de que su salud era delicada.


La amplitud de miras intelectual, su apertura cultural. Con Ada Marti aprendí a leer, si, a Bakunin, Kropotkin, Max Stirner, pero también a Dostoievski, Nietzsche, Ortega y Gasset, Thomas Mann, Stefan Zweig, Y recuerdo todo esto para mostrar hasta que punto no había en las ideas ni en la actitud de Ada ni una gota de sectarismo, Sus ideas- que las tenia y defendía con ardor- no la encerraban en si misma, sino todo lo contrario: hacían de ella una mujer abierta a todo lo que la vida le ponía ante los ojos.

Antonio Pérez González

Foto y texto tomados del libro “La Barcelona rebelde. Guía de una ciudad silenciada.”

 
(*) Fundada en el año 1935 por el cenecista Joan Sans i Sicart. Esta simple denominación (que hoy seria objeto de burla) nos permite “palpar” el retroceso en que nos encontramos mas de ochenta años después.


diciembre 13, 2007

Políticos pederastas... mas allá de Lydia Cacho y el "Gober precioso"


Conforme a la mitología griega, muchos pintores renacentistas representaron el rapto del efebo Ganímedes por parte de Zeus transformado en águila. Contrariamente a todas estas pinturas en las que Ganímedes se ve “condescendiente y feliz”, con este cuadro, pintado en 1635, Rembrandt rompe todos los esquemas eliminando toda alusión erótica al tema y haciendo una dura crítica a la pederastia, representando a un niño aterrado que literalmente se está meando de miedo.



PEDERASTIA Y POLITICA
SEXO Y PODER

En una de sus comparecencias ante el poder judicial Lydia Cacho enarbolaba una camiseta con el muy llamativo lema de “No más pederastas, no más corrupción, no más impunidad”.

Cuando, contraviniendo el sentido de su primera intervención en el asunto, la Suprema Corte de Justicia de la Nación decidió (no de jure pero si de facto) exonerar al “gober precioso” de toda culpabilidad en la violación de las garantías individuales de la periodista que había tenido la osadía de implicar, como actores o cómplices, a encumbrados políticos en hechos de pederastia (Miguel Angel Yunes, Emilio Gamboa Patron, etc.), en la casi totalidad de los medios muchos "analistas políticos" se escandalizaron… pero centrándose en los aspectos de la corrupción y la impunidad olvidándose muy oportunamente de abordar la temática de la pederastia.

Olvido más que sospechoso pero tambíen más que entendible.
En esta, tramposamente mal llamada, “incipiente democracia mexicana” se puede cuestionar y poner en duda el papel de la justicia, incluso el respecto y la existencia misma del tan cacareado estado de derecho… pero lo que no se puede hacer es siquiera insinuar una posible conexión entre pederastia y política. No porque se “toque” a determinados encumbrados políticos o a la clase política como tal… sino porque se alude a algo mucho mas esencial, una de las facetas de la relación entre poder y sexo… la analogía entre el gozo del ejercicio del poder y el gozo sexual.

El mismísimo otrora poderoso secretario de estado norteamericano Henry Kissinger lo expreso con total sinceridad y desenfado: “el poder es el mas potente, el ultimo, afrodisíaco.”
Los mas renombrados estudiosos de la “naturaleza animal” ya han aceptado que en los primates mas evolucionados el acto sexual del acoplamiento no tiene por sola finalidad la perpetuación de la especie, sino que es también un acto simbólico mediante el cual se afirman las relaciones de jerarquía en el seno de un determinado grupo (en este segundo caso el acto puede ser real como puede ser fingido).
Posiblemente no se pueda negar que para nosotros seres humanos el acto sexual tenga otras “connotaciones” que se relacionen mas con la parte del neocórtex de nuestro cerebro (asiento de la capacidad de abstracción y razonamiento) pero no hay la menor duda de que para nosotros el acto sexual tiene también mucho que ver con la parte mas primitiva y reptiliana de nuestro cerebro, la del gozo y el sufrimiento, la recompensa y el castigo.

Es indudable que el ejercicio del poder que se expresa mediante la dominación y la sumisión es fuente de gozo y que consecuentemente el non plus ultra del gozo del poder es el ejercicio del poder llevado a su mas extrema expresión, la de la mayor dominación y sumisión… la del abuso de poder. Mas poderoso se sentirá uno, mas gozo experimentara uno en el ejercicio del poder cuando mayor sea el abuso de poder… y máxima si este abuso queda impune (en el caso de que alguna Ley reglamente y acote el ejercicio del poder).

Por lo tanto que mayor gozo puede haber para un verdadero “animal político”, que el de abusar sexualmente del ser mas indefenso e inocente.
Extrapolando (¡tan poco!) se podría decir que la pederastia, el abuso sexual de niños y niñas, es consubstancial a la búsqueda del máximo poder y placer por parte de todo verdadero “animal político.”

Desde un punto de vista moral o legal, un político pederasta no es un degenerado, ni mucho menos un delincuente… es alguien que busca satisfacer al máximo los placeres propios de su profesión… los que le procuran las mayores sensaciones posibles de dominación y sumisión.