agosto 20, 2007

PALIATIVO


El consumo funciona como un doping, es el paliativo para contrarrestar la vida difícil del individuo y su miseria cotidiana.


La acción de comprar es como una pequeña fiesta en la vida cotidiana, una actividad que rompe la angustia de la rutina y combate la fosilización de la existencia.


Dicho por Gilles Lipovetsky (filosofo y sociólogo francés) en una reciente conferencia en México.

agosto 13, 2007

Y AHORRA ¿QUE?

RESISTENCIA y ACCION DIRECTA

Desde hace décadas, muchas décadas, sabemos que la pretendida Democracia y su compinche el Estado de derecho, no son mas que dos falacias, destinadas a legitimar y perpetuar ad infinitum la dominación de la elite aristocrática (hoy en día el poder de quienes desean ejercerlo, los políticos), económica (quienes detentan el poder que les otorga la riqueza, y lo ejercen) y tecnocratica (quienes detentan el poder que les confiere un pretendido conocimiento, científico a veces, técnico la mayoría de las veces) sobre las multitudes informes cuyo destino manifiesto es el de la sumisión y la obediencia.
Por eso hace décadas que nos rehusamos a ejercer nuestro derecho al voto (y a ser votado), porque sabemos que al hacerlo no haríamos mas que reconocer, y tácitamente aceptar, nuestra posición de individuo cuyo único poder es el de intentar procurarse los bienes materiales (mencionar los demás ya seria una exageración y/o una provocación de mal gusto) necesarios a su supervivencia.

Renuncia que, además de tener por consecuencia el no reconocimiento de las autoridades supuestamente “elegidas”, no implica desistimiento alguno de nuestro derecho (no otorgado o reconocido por dichas autoridades sino ejercido de hecho por voluntad y decisión propias) a expresar y manifestar (de la manera que mas nos convenga) nuestras inconformidades u oposiciones, así como a luchar (por lo medios que mas nos convengan) por una organización social otra que la que nos imponen.
Sabemos, que en los hechos, solo una muy diminuta minoría se atreve a ejercer este derecho autoproclamado y que la mayoría de la “minoría silenciosa” nos contentamos con manifestar nuestra inconformidad mediante marchas pasivas y ordenadas convocadas por quienes se autoproclaman como nuestros lideres opositores del momento (pudiendo llegar a algunas pintas o lanzamiento de algún inofensivo proyectil las veces en que una incontrolada locura se apodera de nosotros).
En cuanto a lo que constituye mas del ochenta por ciento de nuestra actividad diaria destinada a garantizar nuestra supervivencia biológica… el trabajo… recuremos (muy contadas veces y con el temor haciendo trizas nuestro sistema nervioso simpático) a la organización de alguna huelga pasiva (consistiendo en dejar de acudir al espacio en donde vendemos nuestro “saber hacer”) que sabemos de antemano que se terminara con el retorno al redil sin haber conseguido mas que algunas migajas y (esto si que es gratificante) el orgullo de habernos atrevido a decirle un ¡hasta aquí! al amo y señor que (en el mejor de los casos) nos emboba con el cuento (quizás real para el) de la dura realidad de la competencia y su lucha a muerte por defender su propia permanencia en el mercado… y por lo tanto la salvaguarda de nuestra fuente de trabajo… o sea nuestra perpetua enajenación… en busca del sustento diario.

Pues resulta que ahorra hasta esto nos quieren quitar… nos están quitando.

México: Ante el temor a un posible desbordamiento (iluso ya que los lideres de la oposición se han siempre encargado, y lo seguirán haciendo, de apagar todo brote de sublevación) y como parte de la campaña de criminalización de las protestas y militarización, el gobierno panista y sus voceros han emprendido una intensa campaña mediática para restringir a su mas mínima expresión el derecho de manifestación. Al punto de que es con toda seriedad que se habla de que toda manifestación debería de ser autorizada por las autoridades después de que los organizadores de las mismas hubiesen solicitado el correspondiente permiso… y que esta debería de llevarse a cabo en un espacio y un horario tales que no estorbaran el diario quehacer de los buenos ciudadanos que se dedican a cumplir con sus deberes… sin broma… se habla de posibles “manifestodromos”.
México, otra vez: Desde mucho tiempo atrás las autoridades tienen la facultad legal de declarar una huelga “inexistente” (como si pudiesen declarar inexistente el calor o la lluvia cuando estos les molestan). Facultad de la cual hacen uso a su entera conveniencia y discrecionalidad… la cual a últimas fechas es casi siempre en el sentido de una declaratoria de inexistencia. Aquí también se pretende legislar en el sentido de un mayor margen de discrecionalidad de las autoridades… suprimiendo prácticamente en los hechos el derecho de huelga… al fin y al cabo que se trata de que se respete el derecho al trabajo de quienes si quieren trabajar.
Francia: Una de las primeras medidas que implemento el nuevo gobierno derechista del señor Sarkozy fue también de corte legislativo (es muy importante que todos los actos y todas las políticas de un gobierno se sustenten en la Ley)… implementando la obligatoriedad de un “servicio mínimo” cuando una huelga afecta los transportes públicos. El mismo gobierno ya advirtió que este es solo el primer paso y que dicho concepto de servicio mínimo se hará en breve extensivo a la totalidad de las huelgas en los servicios públicos. No dudamos de que el tercer paso será hacerlo extensivo a la totalidad de las huelgas, se den estas en los servicios públicos o en la industria privada… para el bien del país que no puede ser rehén de unos cuantos huelguistas, y exponerse a ver mermada su competitividad.
Alemania: En estos días las autoridades competentes (menos mal que son competentes), siempre de acuerdo con la Ley, prohibieron (por las graves afectaciones económicas que el hecho supondría) lo que se anunciaba ya como la mayor huelga de los ferrocarrileros de los últimos quince años.

Tómense la molestia de revisar los periódicos y verán que no hay un día sin que en algún país del orbe (hasta… sobre todo… los que se dicen democráticos) se restrinjan los derechos a disentir e inconformarse mediante alguna acción que vaya mas haya del derecho a la libre expresión. ¡Pueden decir lo que gusten…mientras se queden quietos!. Derechos que no fueron “regalados” por gobierno alguno sino arrancados después de años y años de lucha… y que se están (eso si legalmente) restringiendo hasta dejarlos en una mera virtualidad despojada de toda efectividad.
Si se fijan un poco mas, también se darán cuenta que en casi todos los casos esta ofensiva se dirige en prioridad en los campos que se relacionan con la comunicación y la energía. Dos de los puntos neurálgicos del actual momento del capitalismo.
Y si se fijan todavía un poco mas, se darán cuenta que la argumentación es siempre la misma. La defensa de los derechos de las mayorías silenciosas contra las minorías vociferantes, de quienes si quieren trabajar por el bien del país contra quienes solo piensan en sus mezquinos intereses individuales y/o corporativos. En resumen de quienes se agachan y arrodillan contra quienes se yerguen y plantan cara, de quienes se someten calladamente contra quienes manifiestan sus desacuerdos e inconformidades, quienes siempre dicen SI a todo contra quienes se atreven a decir NO, aunque sea de vez en cuando.

En esas condiciones que camino nos dejan para poder… ya no digamos luchar por un mundo diferente, mas libre y solidario, en el cual las relaciones con los objetos, la naturaleza y los seres humanos no sean de compra/venta ni se basen en el binomio dominación/sumisión, mando/obediencia… sino simplemente no dejarnos avasallar… RESISTIR.

Décadas atrás, la lucha armada (refiriéndonos a la guerrilla y de ninguna manera al terrorismo) podía ser una respuesta, porque esta tenia, aunque escasas, posibilidades de éxito militar… hoy en día el desarrollo de la tecnología del armamento hace impensable esta posibilidad. Amen de que el recurso a las armas con el objetivo de una derrota militar del enemigo, significa de manera implícita (y las mas de las veces explicita) una lucha por el poder utilizando la lógica del poder… lo cual, obviamente, rechazamos.

Lo primero que el "RESISTIR" puede significar, es (al nivel de cada individuo o en forma organizada y coordinada) rehusarse a someterse a la servidumbre voluntaria en todos los tiempos y espacios posibles de la “vida social”. Rehusarse a participar, a ser participes de la farsa macabra. No retirándose de la vida, viviendo en anacoreta dedicado a la contemplación, sino oponiéndonos, con actitudes y hechos, a rendir pleitesía a los valores que rechazamos y a las respuestas que esperan que demos de acuerdo a estos mismos valores. Rehusémonos a competir, rehusémonos a obedecer ciegamente. Podríamos seguir enlistando un sin numero de verbos después del “rehusémonos a…”, pero todos los importantes se concentran y sintetizan en estos dos, derivan de estos dos “primarios”: competir y obedecer.

En este aspecto, lo básico es NO VOTAR. Ser participe, pero no de la farsa que son las elecciones en el sistema viciado de origen de la democracia representativa (hoy en día mucho mas que antaño por su inclusión en la dinámica del espectáculo y la corrupción de los inmensos recursos financieros que se movilizan), sino de la “huelga de los votantes” (titulo de uno de sus libros) propugnada por el gran periodista, panfletista y escritor francés Octave Mirabeau. Ni siquiera depositar en la urna un “voto en blanco”, como ocurre en la novela de José Saramago “Ensayo sobre la lucidez”. Numerosos estudios de opinión (que forman parte del bien aceitado sistema de control) revelan que la gran mayoría de quienes votan blanco no dan a su voto la connotación de un rechazo al sistema de la democracia representativa en si sino al conjunto de los candidatos que se presentan a la elección, no tienen de donde escoger, se rehúsan a escoger “el menos mal”, como se rehúsan a dar “un voto de castigo”. Lo que debemos de rechazar no es a los candidatos sino al sistema mismo que supone la delegación de nuestra capacidad de autogobernarnos en manos de unos señores que jamás nos “representaran” porque no saben cuales son nuestras necesidades ni nuestros anhelos y porque a quienes si representan no son a quienes los eligieron sino a quienes detentan el verdadero poder y los “eligieron” desde antes de la elección. En este sentido, y aunque el hecho responda a una situación muy particular (nacimiento y desarrollo de un “movimiento popular autónomo” orientado hacia la autogestión y el autogobierno), es sumamente alentador que en las ultimas elecciones legislativas en el estado de Oaxaca, el 70% de los votantes no hayan acudido a las urnas.

Este es el sentido de lo que desde finales del siglo XIX y los albores del siglo XX, los anarquistas y el sindicalismo revolucionario teorizaron y practicaron bajo la apelación de ACCION DIRECTA.

La acción directa supone pasar de una resistencia pasiva e inofensiva a una resistencia activa y ofensiva.

Para el individuo o el grupo que la practica, la acción directa presupone una ruptura, violenta o no, con la trampa de la representación, el derecho y la negociación.
La acción directa supone... el actuar por si mismo, sin ninguna intermediación política o dirección burocrática… no preocuparse por reglas… liberarse de las cortapisas de las ideologías… decidir por uno mismo lo que es justo y a lo cual es imperioso oponerse y resistir… que uno este dispuesto a luchar para tomar el control de su vida e intentar actuar directamente sobre el mundo que lo rodea.
La acción directa no es tanto (o no es para nada) una estrategia larga y pacientemente elaborada resultante de unos presupuestos ideológicos o filosóficos sino, ente todo y simplemente, una necesidad, la manifestación de una “fuerza interior”, de una voluntad… con cierto grado de espontaneidad y creatividad.

Desde hace algunos años, a raíz del incremento de las luchas altermundialistas y con el clásico argumento de que hay que cuidarse de no caer en la trampa de las provocaciones organizadas por el enemigo y no “hacerle el juego”, se ha desarrollado una corriente que propugna una acción directa no violenta.
Lo cual es un contrasentido. No es que la acción directa pueda o no ser violenta, deba o no ser violenta. La acción directa ES violencia… ejercicio de la violencia. No es posible oponerse (resistir) a la oculta y omnipresente, invisible pero cotidiana, violencia del sistema o a la mas esporádica pero infinitamente mas brutal violencia de las fuerzas represivas, sin recurrir a la violencia. Desde la violencia contra las instituciones, las estructuras o los instrumentos de la dominación… hasta la violencia contra quienes encarnan, ordenan o ejecutan la violencia del sistema.

La acción directa que podríamos calificar de menos violenta (si se otorga a este vocablo la connotación de violencia física) es la que consiste en la “reapropiación” de todo aquello a lo cual todos los miembros de una comunidad deberían de tener derecho en forma igualitaria, pero del disfrute de lo cual algunos o muchos han sido despojados. Es por ejemplo la ocupación y acondicionamiento de los espacios públicos o las propiedades privadas en situación de abandono sin la previa autorización de las autoridades o propietarios por parte de quienes carecen de vivienda. El cierre, temporal o permanente, de ciertas calles a la circulación de los medios de transporte privados y/o públicos, dependiendo del objetivo buscado y el uso que se les quiera dar (reuniones de convivencia, eventos festivos, etc.) La calle, al igual que cualquier otro espacio publico, es de toda la población y no únicamente de quienes disponen de los recursos para comprar un medio de transporte particular y usarlo para su propio beneficio.
En muchas circunstancias lo que la legalidad vigente califica de robo puede ser considerado como expropiación y reapropiación de bienes públicos o privados en beneficio de la comunidad en su conjunto o algunos de sus miembros en particular. Basta para esto que el bien “recuperado” haya sido sustraído por alguna institución, persona moral (empresa u otra) o persona física, en forma particular o colectiva, a los miembros de la comunidad. Siempre y cuando el producto del robo no sea para el disfrute particular de quien lo haya decomisado sino devuelto a su legitimo propietario, la comunidad que lo genero mediante su trabajo. A titulo de ejemplo, considerando que la casi totalidad de los bienes de cualquier institución financiera (banco u otra) son legalmente propiedad de instituciones y/o empresas que se hicieron de estos mediante la plus valía extraída de la explotación del trabajo (ya sea en forma directa por medio de una remuneración inferior al valor creado tratándose de las empresas, o en forma indirecta por medio del impuesto tratándose del Estado), no hay la menor duda de que cualquier robo en una institución financiera se considera como una reapropiación por parte de su legitimo propietario que es quien, mediante su trabajo, genero el valor de cambio del bien sustraído.

Sin embargo la acción directa mas apropiada, en el sentido de la que puede causar el mayor daño posible al sistema, es sin duda la que se desarrolla en el campo del trabajo.
Primero, porque es ahí donde los individuos pierden diariamente su humanidad durante largas horas del día, casi todos los días del año, durante casi toda su vida… y que por lo tanto resistir en su lugar de trabajo en ocasión de su trabajo, es quizás la única manera de recuperar la dignidad que van perdiendo hora tras hora, día tras día, año tras año.
Segundo, porque es ahí donde cada uno puede oponerse frontalmente a los valores que el sistema transpira por todos su poros, principalmente los de la competencia, la obediencia y la sumisión… así como romper la dinámica de la nueva economía capitalista en los dos puntos neurálgicos que son las comunicaciones y la energía.

La base de la economía es hoy en día la movilidad (en el doble sentido de movimiento y de adaptabilidad), conjuntada con la velocidad. Tanto de los bienes materiales (materias primas, bienes de producción, mano de obra, etc.) como de los bienes inmateriales (información, conocimiento, etc.). Principal base (tanto operativa como “valorativa”) que se acompaña de una segunda (tan importante como la primera del punto de vista operativo, aunque carezca del elemento “valorativo”) que se puede caracterizar como el exponencial incremento de la energía que requiere para mantener su obligada e infinita expansión.
Características que al constituir su esencia misma al tiempo que son las fuerzas motrices que aseguran su óptimo desempeño, son también su talón de Aquiles.
Por lo tanto ahí es donde se tiene que dar la resistencia (que jamás mereció de manera mas apropiada su nombre). Se trata de obstaculizar, inmovilizar, detener, bloquear, congelar, frenar… el movimiento, las comunicaciones… como tales, en tanto que tales, y en forma particular de la producción y transporte de la energía.

Desde la simple acción individual, hasta la acción llevada a cabo por “organizaciones de masa”, pasando por la mas efectiva la de los pequeños grupos o células clandestinas. Desde el lugar mismo donde el individuo, o el grupo lleva a cabo su actividad productiva (fabrica, oficina, institución… en suma el lugar de trabajo) hasta los lugares y los medios mediante los cuales tienen lugar el movimiento y la comunicación (medios y vías de transporte: aéreo, férreo, carretero, oleoductos, gasoductos, torres de alta tensión, centros de distribución de cualquier tipo de energía, etc.; así como el ciberespacio: hacking, cracking, mass mailing, electronic disturbance, etc.) Desde el mas simple tortuguismo, hasta el sin numero de las diferentes modalidades de huelga, pasando claro esta por la joya de 18 quilates que es el sabotaje (también en su infinidad de modalidades).

Queda la medida mas extrema. No por su “efectividad” al nivel del aparato productivo y la economía en general, pero si en cuanto a su efecto propagandístico y su carga simbólica… la cual es quizás igualmente o mas importante.
El ajusticiamiento (por parte de algún individuo “aislado” o algún grupo o célula creados ex profeso) de quienes idean, forjan, proyectan, ordenan, conducen o ejecutan a un cierto nivel de responsabilidad, las políticas y decisiones que van conformando este sistema que nos niega nuestra existencia y no nos deja mas opción que la de ir “administrando” nuestra ausencia y nuestra supervivencia: “nuestros” (o no tan nuestros) políticos, empresarios, lideres de opinión, etc. Pero también los integrantes de la fuerzas del orden coercitivo y el aparato represor… que el poder sabe muy bien disfrazar de garantes o defensores del Orden y la Ley… nada mas que son SU Orden y SU Ley… y no los nuestros.

Cabe finalizar este llamado a la resistencia, precisando e insistiendo en que todas estas medidas, que podemos reagrupar bajo el concepto de ACCION DIRECTA, desde las mas anodinas e inofensivas hasta las mas sofisticadas y brutales, desde el negarse a participar de la farsa que es todo proceso de elección (en este sistema) hasta el ajusticiamiento, pasando por el sabotaje… son medidas y acciones de autodefensa y resistencia frente al orden impuesto por los detentores del poder… y de ninguna manera lo que estos mismos señores calificaran de actos terroristas. Por muchas razones conceptuales y políticas (que podremos desarrollar en un próximo texto), pero por una básica que consiste en que el terrorismo tiene por medio y/o finalidad el inducir terror mediante el asesinato de “inocentes”, mientras la acción directa, en su diversas modalidades afecta bienes materiales o inmateriales que legítimamente deberían de pertenecer a los integrantes de la comunidad o a la misma como tal pero que unos individuos, organizaciones o instituciones se apropiaron… y en su modalidad mas extrema del ajusticiamiento, solo ejecuta los responsables.

agosto 05, 2007

NO QUEDA NADA

Tengo bastante tiempo intentando traducir al español este bello y portentoso texto del poeta cantante LEO FERRE… sin éxito…así que ni modo ahí les va en su idioma original.

Digamos que es un grito desesperado ante la nada y la ausencia en que se han convertidas nuestras vidas (nuestra inexistencia) en este mundo… “¡que un día será nuestro… en diez mil años!



Léo Ferré


IL N'Y A PLUS RIEN


Écoute, écoute... Dans le silence de la mer, il y a comme un balancement maudit qui vous met le cœur à l'heure, avec le sable qui se remonte un peu, comme les vieilles putes qui remontent leur peau, qui tirent la couverture.

Immobile... L'immobilité, ça dérange le siècle.
C'est un peu le sourire de la vitesse, et ça sourit pas lerche, la vitesse, en ces temps.
Les amants de la mer s'en vont en Bretagne ou à Tahiti...
C'est vraiment con, les amants.

IL n'y a plus rien

Camarade maudit, camarade misère...
Misère, c'était le nom de ma chienne qui n'avait que trois pattes.
L'autre, le destin la lui avait mise de côté pour les olympiades de la bouffe et des culs semestriels qu'elle accrochait dans les buissons pour y aller de sa progéniture.
Elle est partie, Misère, dans des cahots, quelque part dans la nuit des chiens.
Camarade tranquille, camarade prospère,
Quand tu rentreras chez toi
Pourquoi chez toi?
Quand tu rentreras dans ta boîte, rue d'Alésia ou du Faubourg
Si tu trouves quelqu'un qui dort dans ton lit,
Si tu y trouves quelqu'un qui dort
Alors va-t-en, dans le matin clairet
Seul
Te marie pas
Si c'est ta femme qui est là, réveille-la de sa mort imagée

Fous-lui une baffe, comme à une qui aurait une syncope ou une crise de nerfs...
Tu pourras lui dire: "T'as pas honte de t'assumer comme ça dans ta liquide sénescence.
Dis, t'as pas honte? Alors qu'il y a quatre-vingt-dix mille espèces de fleurs?
Espèce de conne!
Et barre-toi!
Divorce-la
Te marie pas!
Tu peux tout faire:
T'empaqueter dans le désordre, pour l'honneur, pour la conservation du titre...

Le désordre, c'est l'ordre moins le pouvoir!

Il n'y a plus rien

Je suis un nègre blanc qui mange du cirage
Parce qu'il se fait chier à être blanc, ce nègre,
Il en a marre qu'on lui dise: " Sale blanc!"

A Marseille, la sardine qui bouche le Port
Était bourrée d'héroïne
Et les hommes-grenouilles n'en sont pas revenus...
Libérez les sardines
Et y'aura plus de mareyeurs!

Si tu savais ce que je sais
On te montrerait du doigt dans la rue
Alors il vaut mieux que tu ne saches rien
Comme ça, au moins, tu es peinard, anonyme, Citoyen!

Tu as droit, Citoyen, au minimum décent
A la publicité des enzymes et du charme
Au trafic des dollars et aux trafiquants d'armes
Qui traînent les journaux dans la boue et le sang
Tu as droit à ce bruit de la mer qui descend
Et si tu veux la prendre elle te fera du charme
Avec le vent au cul et des sextants d'alarme
Et la mer reviendra sans toi si tu es méchant

Les mots... toujours les mots, bien sûr!
Citoyens! Aux armes!
Aux pépées, Citoyens! A l'Amour, Citoyens!
Nous entrerons dans la carrière quand nous aurons cassé la gueule à nos ainés!
Les préfectures sont des monuments en airain... un coup d'aile d'oiseau ne les entame même pas... C'est vous dire!

Nous ne sommes même plus des juifs allemands
Nous ne sommes plus rien

Il n'y a plus rien

Des futals bien coupés sur lesquels lorgnent les gosses, certes!
Des poitrines occupées
Des ventres vacants
Arrange-toi avec ça!

Le sourire de ceux qui font chauffer leur gamelle sur les plages reconverties et démoustiquées
C'est-à-dire en enfer, là où Dieu met ses lunettes noires pour ne pas risquer d'être reconnu par ses admirateurs
Dieu est une idole, aussi!
Sous les pavés il n'y a plus la plage
Il y a l'enfer et la Sécurité
Notre
vraie vie n'est pas ailleurs, elle est ici
Nous sommes au monde, on nous l'a assez dit
N'en déplaise à la littérature

Les mots, nous leur mettons des masques, un bâillon sur la tronche
A l'encyclopédie, les mots!
Et nous partons avec nos cris!
Et voilà!

Il n'y a plus rien... plus, plus rien

Je suis un chien?
Perhaps!
Je suis un rat
Rien

Avec le cœur battant jusqu'à la dernière battue

Nous arrivons avec nos accessoires pour faire le ménage dans la tête des gens:
"Apprends donc à te coucher tout nu!
"Fous en l'air tes pantoufles!
"Renverse tes chaises!
"Mange debout!
"Assois-toi sur des tonnes d'inconvenances et montre-toi à la fenêtre en gueulant des gueulantes de principe

Si jamais tu t'aperçois que ta révolte s'encroûte et devient une habituelle révolte, alors,
Sors
Marche
Crève
Baise
Aime enfin les arbres, les bêtes et détourne-toi du conforme et de l'inconforme
Lâche ces notions, si ce sont des notions
Rien ne vaut la peine de rien

Il n'y a plus rien... plus, plus rien

Invente des formules de nuit: CLN... C'est la nuit!
Même au soleil, surtout au soleil, c'est la nuit
Tu peux crever... Les gens ne retiendront même pas une de leur inspiration.
Ils canaliseront sur toi leur air vicié en des regrets éternels puant le certificat d'études et le catéchisme ombilical.
C'est vraiment dégueulasse
Ils te tairont, les gens.
Les gens taisent l'autre, toujours.
Regarde, à table, quand ils mangent...
Ils s'engouffrent dans l'innommé
Ils se dépassent eux-mêmes et s'en vont vers l'ordure et le rot ponctuel!

La ponctuation de l'absurde, c'est bien ce renversement des réacteurs abdominaux, comme à l'atterrissage: on rote et on arrête le massacre.
Sur les pistes de l'inconscient, il y a des balises baveuses toujours un peu se souvenant du frichti, de l'organe, du repu.

Mes plus beaux souvenirs sont d'une autre planète
Où les bouchers vendaient de l'homme à la criée

Moi, je suis de la race ferroviaire qui regarde passer les vaches
Si on ne mangeait pas les vaches, les moutons et les restes
Nous ne connaîtrions ni les vaches, ni les moutons, ni les restes...
Au bout du compte, on nous élève pour nous becqueter
Alors, becquetons!
Côte à l'os pour deux personnes, tu connais?

Heureusement il y a le lit: un parking!
Tu viens, mon amour?
Et puis, c'est comme à la roulette: on mise, on mise...
Si la roulette n'avait qu'un trou, on nous ferait miser quand même
D'ailleurs, c'est ce qu'on fait!
Je comprends les joueurs: ils ont trente-cinq chances de ne pas se faire mettre...
Et ils mettent, ils mettent...
Le drame, dans le couple, c'est qu'on est deux
Et qu'il n'y a qu'un trou dans la roulette...

Quand je vois un couple dans la rue, je change de trottoir

Te marie pas
Ne vote pas
Sinon t'es coincé

Elle était belle comme la révolte
Nous l'avions dans les yeux,
Dans les bras dans nos futals
Elle s'appelait l'imagination

Elle dormait comme une morte, elle était comme morte
Elle sommeillait
On l'enterra de mémoire

Dans le cocktail Molotov, il faut mettre du Martini, mon petit!

Transbahutez vos idées comme de la drogue... Tu risques rien à la frontière
Rien dans les mains
Rien dans les poches

Tout dans la tronche!

- Vous n'avez rien à déclarer?
- Non.
- Comment vous nommez-vous?
- Karl Marx.
- Allez, passez!

Nous partîmes... Nous étions une poignée...
Nous nous retrouverons bientôt démunis, seuls, avec nos projets d'imagination dans le passé
Écoutez-les... Écoutez-les...
Ça rape comme le vin nouveau
Nous partîmes... Nous étions une poignée
Bientôt ça débordera sur les trottoirs
La parlote ça n'est pas un détonateur suffisant
Le silence armé, c'est bien, mais il faut bien fermer sa gueule...
Toutes des concierges!
Écoutez-les...

Il n'y a plus rien

Si les morts se levaient?
Hein?

Nous étions combien?
Ça ira!

La tristesse, toujours la tristesse...

Ils chantaient, ils chantaient...
Dans les rues...

Te marie pas Ceux de San Francisco, de Paris, de Milan
Et ceux de Mexico
Bras dessus bras dessous
Bien accrochés au rêve

Ne vote pas

0 DC8 des Pélicans
Cigognes qui partent à l'heure
Labrador Lèvres des bisons
J'invente en bas des rennes bleus
En habit rouge du couchant
Je vais à l'Ouest de ma mémoire
Vers la Clarté vers la Clarté

Je
m'éclaire la Nuit dans le noir de mes nerfs
Dans l'or de mes cheveux j'ai mis cent mille watts
Des circuits sont en panne dans le fond de ma viande
J'imagine le téléphone dans une lande
Celle où nous nous voyons moi et moi
Dans cette brume obscène au crépuscule teint
Je ne suis qu'un voyant embarrassé de signes
Mes circuits déconnectent
Je ne suis qu'un binaire

Mon fils, il faut lever le camp comme lève la pâte
Il est tôt Lève-toi Prends du vin pour la route
Dégaine-toi du rêve anxieux des biens assis
Roule Roule mon fils vers l'étoile idéale
Tu te rencontreras Tu te reconnaîtras
Ton dessin devant toi, tu rentreras dedans
La mue ça ses fait à l'envers dans ce monde inventif
Tu reprendras ta voix de fille et chanteras Demain
Retourne tes yeux au-dedans de toi
Quand tu auras passé le mur du mur
Quand tu auras outrepassé ta vision
Alors tu verras rien

Il n'y a plus rien

Que les pères et les mères
Que ceux qui t'ont fait
Que ceux qui ont fait tous les autres
Que les "monsieur"
Que les "madame"
Que les "assis" dans les velours glacés, soumis, mollasses
Que ces horribles magasins bipèdes et roulants
Qui portent tout en devanture
Tous ceux-là à qui tu pourras dire:

Monsieur!
Madame!

Laissez donc ces gens-là tranquilles
Ces courbettes imaginées que vous leur inventez
Ces désespoirs soumis
Toute cette tristesse qui se lève le matin à heure fixe pour aller gagner VOS sous,
Avec les poumons resserrés
Les mains grandies par l'outrage et les bonnes mœurs
Les yeux défaits par les veilles soucieuses...
Et vous comptez vos sous?
Pardon.... LEURS sous!

Ce qui vous déshonore
C'est la propreté administrative, écologique dont vous tirez orgueil
Dans vos salles de bains climatisées
Dans vos bidets déserts
En vos miroirs menteurs...

Vous faites mentir les miroirs
Vous êtes puissants au point de vous refléter tels que vous êtes
Cravatés
Envisonnés
Empapaoutés de morgue et d'ennui dans l'eau verte qui descend
des montagnes et que vous vous êtes arrangés pour soumettre
A un point donné
A heure fixe
Pour vos narcissiques partouzes.
Vous vous regardez et vous ne pouvez même plus vous reconnaître
Tellement vous êtes beaux
Et vous comptez vos sous
En long
En large
En marge
De ces salaires que vous lâchez avec précision
Avec parcimonie
J'allais dire "en douce" comme ces aquilons avant-coureurs et qui racontent les exploits du bol alimentaire, avec cet apparat vengeur et nivellateur qui empêche toute identification...
Je veux dire que pour exploiter votre prochain, vous êtes les champions de l'anonymat.

Les révolutions? Parlons-en!
Je veux parler des révolutions qu'on peut encore montrer
Parce qu'elles vous servent,
Parce qu'elles vous ont toujours servis,
Ces révolutions de "l'histoire",
Parce que les "histoires" ça vous amuse, avant de vous intéresser,
Et quand ça vous intéresse, il est trop tard, on vous dit qu'il s'en prépare une autre.
Lorsque quelque chose d'inédit vous choque et vous gêne,
Vous vous arrangez la veille, toujours la veille, pour retenir une place
Dans un palace d'exilés, entouré du prestige des déracinés.
Les racines profondes de ce pays, c'est Vous, paraît-il,
Et quand on vous transbahute d'un "désordre de la rue", comme vous dites, à un "ordre nouveau" comme ils disent, vous vous faites greffer au retour et on vous salue.

Depuis deux cent ans, vous prenez des billets pour les révolutions.
Vous seriez même tentés d'y apporter votre petit panier,
Pour n'en pas perdre une miette, n'est-ce-pas?
Et les "vauriens" qui vous amusent, ces "vauriens" qui vous dérangent aussi, on les enveloppe dans un fait divers pendant que vous enveloppez les "vôtres" dans un drapeau.

Vous vous croyez toujours, vous autres, dans un haras!
La race ça vous tient debout dans ce monde que vous avez assis.
Vous avez le style du pouvoir
Vous en arrivez même à vous parler à vous-mêmes
Comme si vous parliez à vos subordonnés,
De peur de quitter votre stature, vos boursouflures, de peur qu'on vous montre du doigt, dans les corridors de l'ennui, et qu'on se dise: "Tiens, il baisse, il va finir par se plier, par ramper"
Soyez tranquilles! Pour la reptation, vous êtes imbattables; seulement, vous ne vous la concédez que dans la métaphore...
Vous voulez bien vous allonger mais avec de l'allure,
Cette "allure" que vous portez, Monsieur, à votre boutonnière,
Et quand on sait ce qu'a pu vous coûter de silences aigres,
De renvois mal aiguillés
De demi-sourires séchés comme des larmes,
Ce ruban malheureux et rouge comme la honte dont vous ne vous êtes jamais décidé à empourprer votre visage,
Je me demande comment et pourquoi la Nature met
Tant d'entêtement,
Tant d'adresse
Et tant d'indifférence biologique
A faire que vos fils ressemblent à ce point à leurs pères,
Depuis les jupes de vos femmes matrimonaires
Jusqu'aux salonnardes équivoques où vous les dressez à boire,
Dans votre grand monde,
A la coupe des bien-pensants.

Moi, je suis un bâtard.
Nous sommes tous des bâtards.
Ce qui nous sépare, aujourd'hui, c'est que votre bâtardise à vous est sanctionnée par le code civil
Sur lequel, avec votre permission, je me plais à cracher, avant de prendre congé.
Soyez tranquilles, Vous ne risquez Rien

Il n'y a plus rien

Et ce rien, on vous le laisse!
Foutez-vous en jusque-là, si vous pouvez,
Nous, on peut pas.
Un jour, dans dix mille ans,
Quand vous ne serez plus là,
Nous aurons TOUT
Rien de vous
Tout de nous
Nous aurons eu le temps d'inventer la Vie, la Beauté, la Jeunesse,
Les Larmes qui brilleront comme des émeraudes dans les yeux des filles,
Le sourire des bêtes enfin détraquées,
La priorité à Gauche, permettez!

Nous ne mourrons plus de rien
Nous vivrons de tout

Et les microbes de la connerie que nous n'aurez pas manqué de nous léguer, montant
De vos fumures
De vos livres engrangés dans vos silothèques
De vos documents publics
De vos règlements d'administration pénitentiaire
De vos décrets
De vos prières, même,
Tous ces microbes...
Soyez tranquilles,
Nous aurons déjà des machines pour les révoquer

NOUS AURONS TOUT

Dans dix mille ans.