Ayer, Trump, Macron y May bombardearon Siria.
¿Porque, digo que fueron estos tres siniestros personajes y no las
naciones que gobiernan, y las fuerzas armadas de dichos Estados?
Uno, porque, si bien son los militares quienes ejecutan la orden, los
¿Jefes de Estado? son quienes toman la decisión.
Dos, porque, resulta que, como por casualidad, este ataque militar se
da justo en el momento en que los tres tienen que enfrentar muy serios
cuestionamientos en cuanto a su actuar político y el modo según el cual ejercen
el poder en sus respectivos países.
Para Trump, no es ninguna novedad, pero resulta que sus “problemas” se
intensificaron mucho en los últimos días, siendo el ultimo la publicación (unas
horas antes del ataque) del libro del ex director del FBI, James Comey que el
despidió feamente.
Tratándose de Macron, simplemente porque después de unos primeros
meses en el cargo, en los cuales reinaba sobre Francia como lo hubiese hecho
cualquier Rey (implementando, o tratando de implementar, toda una serie de
reformas políticas y económicas, pretendidamente destinas a “modernizar” el
país, con una óptica indiscutiblemente neoliberal), con la total pasividad de
una oposición tetanizada, sorprendentemente, el Presidente se encontró con una
virulenta oposición a esta política, con huelgas, manifestaciones y
ocupaciones, tanto en el mundo del trabajo como en el estudiantil.
En cuanto a May, esta se encuentra con un bajísimo nivel de
popularidad, y severamente cuestionada, tanto en su gestión de la salida del
Brexit, como en su política interior.
Abriendo un paréntesis… creo sumamente preocupante y condenable que,
hoy en día, los políticos profesionales, todos ellos, en el poder o en busca de
este, tomen sus decisiones, no en función de principios que se traduzcan en un
programa de gobierno cuya finalidad sea el interés general, sino en función de
su índice de popularidad… el cual, para ellos, no es otra cosa que el mayor
indicador de su logro o fracaso en la captación de los votos que requieren para
mantenerse en el poder o alcanzarlo… uno más , quizás toral, del perverso
efecto de la democracia representativa.
Retornando al tema… me parece que, además de los evidentes intereses
geoestratégicos en juego en esta región, la coincidencia entre estos bombardeos
y la “crisis de popularidad” de quienes tomaron tal decisión, no es mera
coincidencia.
Es mas que sabido y comprobado, que el recurrir al “ruido de los
sables”, el sentimiento patriótico y el orgullo por procuración que esto genera
entre la población, casi siempre, se traduce en un incremento de la popularidad
de quien hace caer el trueno de la justicia sobre el enemigo designado como
tal… y con mayor razón si es presentado como un despiadado dictador que mata
inocentes, principalmente niños y mujeres… con la agravante de emplear para tal
efecto armas químicas… que como todos sabemos provocan una muerte lenta y
dolorosa, cuando las balas, las bombas y los misiles son mucho más eficaces y
letales, además de matar con mucha más precisión (los “daños colaterales”, pues
eso son daños colaterales y por lo tanto involuntarios) y menos sufrimiento
(siempre y cuando la bala le destroce la cabeza o un órgano vital, y las bombas
o misiles le provoquen una muerte limpia y no lo desmembren o lo desangren lentamente.)
Eso sin mencionar, que el bombardeo se produjo horas antes de que una
comisión de expertos internacionales (propuestos por las fuerzas del bien y
aceptada por las del mal) empezara su trabajo para determinar si este ataque
químico había efectivamente tenido lugar… y, en caso de ser así, quienes eran
los responsables.
De la misma manera que siempre pensé, y sigo pensando, que los
atentados del 11 de septiembre 2001 fueron planeados (y posiblemente
ejecutados) por el Establishment norteamericano… que quedo fehacientemente
comprobado que las “armas de destrucción masiva” de Sadam Hussein, nunca
existieron… que el hundimiento del barco norteamericano que sirvió de pretexto
para la autorización de bombardear Vietnam del Norte, había sido la obra de los
mismos norteamericanos… igualmente pienso que esta supuesta “gasificación” fue
un montaje de los USA y la fuerzas rebeldes contrarias al régimen de Bachar al
Asad.
Todos afirman tener pruebas contundentes, pero nadie las muestra. Para
mí, unos videos de niños tendidos en el suelo, respirando con mascarillas y
bañados con mangueras… simplemente no son pruebas… es una escena que me resulta
con muchas posibilidades de ser una actuación, un vil montaje de las famosas ¿brigadas
humanitarias? conocidas como los “cascos blancos”.
Les adjunto un artículo, publicado en el diario digital español
PUBLICO el día anterior a los bombardeos. Que si bien su titulado me parece
demasiado provocativo, exagerado y finalmente equivocado, me resulta
particularmente interesante por lo que da a conocer sobre estos heroicos
“cascos blancos”.
Ahí les va:
¿HACIA LA TERCERA GUERRA MUNDIAL?
Mikel Muñoz Aranburu
El presidente de los EE.UU. ha
acusado a Siria, Rusia e Irán de haber perpetrado un ataque con armas químicas
que habría causado unas 70 muertes, la mayoría niños y niñas, además de cientos
de heridos [1]. Sin esperar a que se investigue lo sucedido, Trump junto a la
mayoría de dirigentes occidentales, así como, la totalidad de medios de
comunicación están culpabilizando al gobierno sirio y sus aliados basándose
únicamente en las declaraciones de miembros de una organización terrorista,
Jaish al-Islam, y una ONG que trabaja en la zona que controlan, los Cascos
Blancos [2].
Hace un año, el 4 abril de 2017,
ocurrió un ataque similar en la ciudad de Khan Sheikhoun situada en la
provincia de Idlib, que estaba, y sigue estando, en poder de la sucursal en el
país de Al Qaeda. Decenas de personas murieron. En ese momento, el presidente
Trump también acusó a Siria en cuanto se produjo el incidente y a los tres días
lanzó un ataque con 59 misiles Tomahawk contra la base aérea desde la que
supuestamente se había producido el ataque químico. Murieron 6 soldados de la
base y 9 civiles de los pueblos de alrededor, entre ellos, cuatro niños [3].
En ambos incidentes la principal
fuente de información para acusar al gobierno sirio de haber realizado un
ataque con armas químicas ha sido la ONG conocida como los Cascos Blancos. Esta
ONG, que proclama ser siria e independiente de cualquier gobierno, fue fundada
hace 5 años en Estambul (Turquía) por James Le Mesurier, un antiguo oficial de
inteligencia del ejército británico que, posteriormente, trabajó como
mercenario [4]. En su creación participó la Oficina de Iniciativas
Transicionales de la USAID que, como su nombre indica, se ha dedicado a la
promoción de cambios de régimen alrededor del mundo y es la rama encargada de
las cuestiones políticas de esta agencia estadounidense que, en teoría, se
dedica al desarrollo [5]. Esta oficina aportó 23 millones de dólares para la
puesta en funcionamiento de la ONG que, posteriormente, fueron ampliados hasta
llegar a los 120 millones de dólares con las aportaciones del Foreign Office
británico y de otros gobiernos europeos [6]. Los Cascos Blancos también
proclaman ser neutrales después de haber estado, prácticamente desde su
creación, haciendo campaña para que se estableciese una “no-fly-zone” [7], que
fue la fórmula elegida por los EE.UU. para engañar a la ONU y bombardear Libia
con el objetivo de favorecer la victoria de los grupos yihadistas en ese país
[8].
Los Cascos Blancos se han dado a
conocer alrededor de todo el mundo a través de los videos que ellos mismos se
han grabado y en donde aparecen realizando tareas heroicas para salvar a
supuestas víctimas civiles de los bombardeos del gobierno sirio y sus aliados
que, la mayor parte de las veces, son niños y niñas [9]. Han llegado a ganar un
óscar con un documental hecho por ellos mismos sobre sí mismos (lo cual no deja
en muy buen lugar al jurado que se lo otorgó) y han conseguido el apoyo de
numerosas celebridades. Pero, sobre todo, se han establecido como una fuente de
información de referencia para los medios de comunicación de todo el mundo que
publican sus videos y comunicados sin ningún tipo de comprobación, confirmación
o contraste.
Diversos periodistas
independientes han abordado esta tarea de comprobar los videos y, también
algunos expertos. Entre estos últimos, destaca Scott Ritter. El que fuera
inspector de armas de las Naciones Unidas en Irak entre 1991 y 1998 encargado
de buscar y destruir las posibles armas de destrucción masiva, tuvo que dimitir
del cargo por su negativa a apoyar las acusaciones estadounidenses que,
posteriormente, se comprobaron falsas y que condujeron a una guerra que costó
la vida, al menos, a 650.000 personas [11]. Además de ser uno de los más
reconocidos expertos en armas, ha trabajado como especialista en materiales
peligrosos con el equipo de Rescate Urbano de Nueva York [10]. Según este
experto, “estos videos (de los Cascos Blancos) representan evidencia de facto
de incompetencia peligrosa o, peor, de fraude” [12]. Y explica que:
“Las técnicas utilizadas por los
Cascos Blancos no solo son incorrectas técnicamente, sino que son, también,
peligrosas para cualquiera que estuviera realmente atrapado. La introducción de
excavadoras para mover escombros o el taladro y martilleo descuidado del
cemento en las inmediaciones de una víctima atrapada llevarían inevitablemente
al desplazamiento de los escombros acumulados aplastando a la víctima atrapada
hasta, posiblemente, la muerte. En mi opinión, los videos son puro teatro y,
una de dos, o han sido escenificados para impresionar a una audiencia inexperta
o, de haberse llevado a cabo realmente, lo habrían sido con total desprecio por
el bienestar de cualquier víctima real” [13].
Como experto en armas de
destrucción masiva realizó la siguiente evaluación sobre los videos que los
Cascos Blancos difundieron sobre el incidente con armas químicas sucedido hace
un año en Khan Sheikhoun:
“Desde la utilización descuidada
de los equipos de protección personal (no existente o bien empleado de manera
que impediría cualquier protección frente a potenciales exposiciones) hasta el
manejo de las víctimas o los supuestos intentos de descontaminación, todo lo
que los Cascos Blancos hicieron era operacionalmente incorrecto y expondría a
daños aún mayores tanto a ellos mismos como a las víctimas a las que tan ostensiblemente
estaban tratando. Como en el caso de sus “rescates” de víctimas de estructuras
colapsadas, creo que los intentos de los Cascos Blancos en Khan Sheikhun fueron
una actuación teatral diseñada para impresionar a un público no especializado
en el tema” [14].
Estos videos fueron las únicas
evidencias, junto a declaraciones de miembros de los Cascos Blancos y
“activistas” de Al Qaeda, en las que se basaron las cancillerías occidentales y
la totalidad de la prensa mundial para culpar al gobierno sirio del incidente.
Ahora, un año más tarde, la administración norteamericana, los gobiernos
europeos y la prensa mundial vuelven a culpar al gobierno sirio de un ataque
con armas químicas. Las únicas evidencias hasta el momento, vuelven a ser unos
videos difundidos por los Cascos Blancos que fueron tomados en su totalidad en
sótanos (por lo que pueden ser de cualquier sitio) junto a las declaraciones de
miembros de esta ONG y “activistas”, en este caso, de Jaish al-Islam que
aseguran que el ejército sirio lanzó desde un helicóptero un barril-bomba con
gas sarín [15].
No ha habido ninguna verificación
independiente de la información proporcionada por los Cascos Blancos ni nadie
ha certificado todavía ninguna muerte [16]. Y, sin embargo, ya se han producido
las primeras respuestas militares. Aviones israelíes lanzaron 2 misiles contra
una base militar siria matando a 7 asesores militares iraníes [17]. Y el
presidente norteamericano Trump ha prometido una respuesta contundente y
rápida. Es decir, una respuesta militar sin esperar a que se determine
exactamente qué es lo que ha sucedido [18].
Esto podría ser el comienzo de la
Tercera Guerra Mundial o, como mínimo, de un enfrentamiento militar muy serio
entre las dos mayores potencias nucleares del planeta, los EE.UU. y Rusia. Las
autoridades rusas han sido contundentes al negar la implicación siria en el
incidente y han avisado muy seriamente de que “una intervención militar bajo
pretextos falsos y fabricados en Siria, donde hay estacionados soldados rusos a
petición del gobierno legítimo, es absolutamente inaceptable y podría
desencadenar las más graves consecuencias” [19].
Es, cuando menos, irresponsable
que esta escalada militar sin precedentes entre Rusia y los EE.UU. haya tenido
su origen en unos informes y videos, sin contrastar ni confirmar, de una ONG
más que sospechosa y las declaraciones de “activistas” de organizaciones
terroristas. Es, también, cuando menos, llamativo que toda la prensa mundial
reproduzca acríticamente las acusaciones sin pruebas que los gobiernos
occidentales están lanzando contra el gobierno sirio y sus aliados. Como llama,
también, mucho la atención que, exceptuando algunos medios independientes de
izquierdas, ningún medio de comunicación se cuestione las razones o los
objetivos que podrían existir detrás del supuesto ataque químico.
Las armas químicas se han quedado
completamente obsoletas. La última vez que se utilizaron a gran escala fue en
la guerra entre Irak e Irán en los 80′. Con la asistencia estadounidense,
Saddam Hussein utilizó diferentes armas químicas contra las tropas iraníes y
contra pueblos kurdos. Una vez acabada la contienda, el Instituto de Guerra del
ejército norteamericano publicó un informe titulado “Lecciones aprendidas: la
Guerra Irán-Irak” en el que en su apartado dedicado a las armas químicas las
describe como poseedoras de “un índice de mortalidad muy bajo”. Para continuar
diciendo que es “exactamente como en la I Guerra Mundial, durante la cual el
ratio de muertes respecto a los heridos fue del 2-3%”, índice que se mantendría
en la guerra Irán-Irak “incluso con la introducción de agentes nerviosos” [20].
Es decir, que únicamente tiene sentido, militarmente hablando, su utilización a
gran escala. Como se hizo durante la I Guerra Mundial donde se utilizaron
190.000 toneladas de agentes químicos, principalmente clorina y gas mostaza
[21]. O como ocurrió en las guerras de Corea y Vietnam donde los EE.UU.
arrasaron ambos países con el famoso agente naranja. Se estima que 3 millones
de coreanos (una tercera parte de la población de Corea del Norte) y otros 3
millones de vietnamitas perdieron la vida como resultado de su uso [22]. Pero
no tiene ningún sentido, militarmente hablando, lanzar un barril-bomba con
agentes químicos para matar a menos de un centenar de personas. En primer
lugar, porque es mucho más eficaz utilizar armas convencionales.
No tiene ninguna lógica utilizar
armas químicas en una escala tan reducida. Pero aún tendría mucho menos sentido
su utilización por parte del ejército sirio en las actuales circunstancias.
Después de 7 años de una muy cruenta guerra que el gobierno sirio ha estado a
punto de perder frente a los grupos yihadistas (hasta la intervención rusa) y
en la que han muerto unas 400.000 personas de las cuales aproximadamente la
mitad serían soldados sirios, las tropas gubernamentales se encuentran más
cerca de la victoria que nunca. Concretamente, en el bastión de Guta-Este, en
poder de grupos terroristas desde hace unos 4 años, durante el último mes las
tropas sirias habían recuperado cerca del 90% del enclave y el último grupo
yihadista que quedaba, Jaish al-Islam, estaba derrotado. Tan solo podía
negociar los términos de su rendición. ¿Qué sentido tendría, en este escenario,
tirar un barril-bomba con armas químicas que no van a proporcionar ninguna
ventaja ni ningún avance militar? ¿Qué sentido tendría utilizar armas químicas
si lo único que pueden conseguir es provocar una intervención de los EE.UU. y
echar por la borda el esfuerzo de 7 años de guerra y el sacrificio de cientos
de miles de vidas de soldados (además de las de los civiles)?
Ninguno. Pero, en cambio, tiene
todo el sentido utilizar armas químicas en un atentado de bandera falsa para
provocar una intervención de los EE.UU. y la OTAN que pudiese dar la vuelta a
una guerra que se está a punto de perder. Los grupos yihadistas tienen un
incentivo muy potente para utilizar armas químicas. Podría suponer la
diferencia entre perder la guerra o ganarla. Sin embargo, esta posibilidad ni
tan siquiera se menciona en los muchos artículos que los medios corporativos
están publicando estos días. Atribuyen directamente la responsabilidad de lo
sucedido al gobierno sirio y ya todos hablan del “supuesto ataque químico de
Al-Asad” [23] sin plantear ninguna otra posibilidad.
Como tampoco plantean ninguna otra
alternativa el presidente norteamericano y el resto de dirigentes occidentales
aún teniendo conocimiento de que existen. La revista del gobierno
estadounidense, Voice of America, publicaba hace 2 años un artículo en el que
dirigentes del grupo Jaish al-Islam, el mismo que controla la zona donde se ha
producido el ataque químico, reconocían haber empleado armas químicas en su
lucha contra tropas kurdas [24]. Es decir, el gobierno de los EE.UU. tiene
perfecto conocimiento de la capacidad de este grupo para realizar ataques con
armas químicas y, sin embargo, tan solo contempla una posibilidad en este caso.
Acusa, sin tener pruebas para ello ni esperar a que se realice una
investigación sobre lo sucedido, al gobierno sirio y amenaza con represalias
que podrían desembocar en la III Guerra Mundial.
NOTAS:
- “At
least 70 killed in suspected chemical attack in Douma”, BBC News, 8 Abr
2018.
- “Dozens
suffocate in suspected chemical weapon attack in Syria, opposition says”,
CBS News, 8 Abr 2018.
- Kareem
Khadder, Schams Elwazer, Elizabeth Roberts, Eyad Kourdi and Tamara
Qiblawi, “Suspected gas attack in Syria reportedly kills dozens”, CNN, 7
Abr 2017.
Sophie Mengal, “The US Cruise Missile Attack against Syria, Illegal Act of
Aggression, Three Children Killed”, Global Research, 7 Abr 2017.
- Whitney
Webb, “James Le Mesurier: The Former British Mercenary Who Founded The
White Helmets”, MintPress News, 31 Jul 2017.
- Max
Blumenthal, “How the White Helmets Became International Heroes While
Pushing U.S. Military Intervention and Regime Change in Syria”, Alternet,
2 Oct 2016.
Incluso el sitio de noticias The
National con sede en Abu Dabi y financiado por los Emiratos Árabes Unidos
reconoce l aparticipación de los gobiernos estadounidense y británico en la
creación de los cascos Blancos.
Jonathan Gornall, “Newsmaker: The White Helmets”, The National, 29 Sep
2016.
- “White
Helmets Funded By US, UK, EU and Qatar governments”, 21st Century Wire, 10
Oct 2016.
- https://www.whitehelmets.org/en
- Si alguien está interesado en conocer las mentiras
y engaños que se utilizaron para promover el bombardeo de Libia que
propició la victoria de los grupos yihadistas y arrojó al país al caos
absoluto del que todavía no ha podido salir, es muy recomendable la
lectura del informe que la Cámara de los Comunes británica (la cámara baja
del parlamento) realizó sobre la intervención de los países de la OTAN, en
general, y del gobierno británico en particular.
- Curiosamente, jamás han publicado ningún video
rescatando víctimas de bombardeos de la coalición liderada por los EE.UU.
ni han denunciado nunca que los bombardeos de esta coalición hayan
producido bajas civiles.
- http://www.cdutsara.org/the_association.html
- Gilbert
Burnham, Riyadh Lafta, Shannon Doocy, Les Roberts, “Mortality after the
2003 invasion of Iraq: a cross-sectional cluster sample survey”, The
Lancet, 12 Oct 2006.
- Scott
Ritter, “Ex-Weapons Inspector: Trump’s Sarin Claims Built on ‘Lie’”, The
American Conservative, 29 Jun 2017.
- ibid.
- ibid.
- ibid
- Como se reconoce en muchos de los artículos que ha
publicado la prensa estos días. Valga como ejemplo el artículo de la BBC
de las notas 1 y 14. O el siguiente de Reuters:
Michelle Nichols, “U.N. Security Council to meet on Monday after Syria
attack”, Reuters, 8 Abr 218.
- “Seven
Iranians were killed in strike on Syrian air base: Tasnim”, Reuters, 10
Abr 2018.
- Steve
Holland, Michelle Nichols, “Trump vows quick action in response to
suspected chemical attack in Syria”, Reuters, 9 Abr 2018.
- Tyler
Durden, “Trump Threatens Putin, “Animal Assad” Over Syrian “Chemical
Attack”; Russia Warns Of “Grave” Response If US Launches Strike”, Zero
Hedge, 8 Abr 2018.
- Tony
Cartalucci, “The True Nature of Chemical Warfare – Lessons From the 1980’s
Iran-Iraq War”, Land Destroyer, 6 Abr 2017.
- https://en.wikipedia.org/wiki/Chemical_weapons_in_World_War_I
- https://es.wikipedia.org/wiki/Agente_Naranja
- “Rusia acusa a Israel del bombardeo en un
aeropuerto militar en Siria tras el supuesto ataque químico de Al Asad “,
Eldiario.es, 9 Abr 2018.
- Sirwan Kajjo, “Kurdish Officials: Rebels May Have
Used Chemicals in Aleppo”, Voice of America, 8 Abr 2016.
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