Hace veintisiete meses…
la Huesuda quiso llevarme
a sus aposentos.
Unos modernos brujos…
de blanco vestidos…
de sus manos me
arrancaron.
Presentimiento?
Premonición?
Presagio?
No sé cuándo vendrá de
nuevo por mi…
ni le temo.
No obstante…
la siento cada día más
cercana…
más atrevida…
más próxima.
No quisiera que me
llevara…
sin haberme despedido.
De quienes a lo largo de
mi diminuta vida…
hicieron que mi
corazón latiera con más fuerza…
cuando era solo una
bomba, un metrónomo…
estaba por detenerse…
anhelaba que se
detuviera.
Sera que lo anhelo…
sin la voluntad para
ir a su encuentro…
sin siquiera la
fuerza.
Entregado…
esperando.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario