junio 01, 2018

SUEÑO… ¿PREMONITORIO?




Supongo que nunca he dejado de soñar (dormido se entiende… soñar despierto es un asunto de la mayor importancia, pero que no viene al caso en este momento), pero hace mucho tiempo que al despertarme no tengo el más mínimo recuerdo de lo que, con toda seguridad, he soñado.

Extrañamente, esta mañana, al despertarme tuve un recuerdo bastante preciso de lo que soñé.

Un sueño que espero no sea premonitorio.

Temporalmente y espacialmente mi sueño se situaba el día de las próximas elecciones presidenciales, en tanto que espectador dotado del don de ubicuidad, frente a la pantalla a la vez que presente en un centro de votación.
Habiendo pasado el zenit del día,… ¿quién sabe en base a que datos (pero en los sueños la lógica cartesiana no tiene vigencia) todos ya sabíamos que AMLO era el próximo Presidente de México.
Entonces se presenció, físicamente y a través de la pantalla, que muchos centros de votación se encontraban bajo el fuego de unas bandas armadas, de origen desconocido. Asalto que se saldaba con decenas de muertos y heridos.
Al poco tiempo de estos ataques, alguna institución gubernamental (quizás la secretaria de gobernación) con el beneplácito del INE, declaraba que, ante la gravedad de tales hechos, se daba por terminada la jornada electoral… sin precisar el futuro de esta, si se cancelaba por tiempo indefinido o si solo se posponía para une fecha todavía por conocer.

En concreto… se desconocía, de antemano, los resultados que llevaban a Andrés Manuel López Obrador a ser el próximo Presidente.

No creo, espero, que este desconocimiento no sea producto de tales ataques armados… sin embargo, si creo que, mediante triquiñuelas legaloides, podría darse el desconocimiento del resultado, si el fraude no se traduce en el resultado esperado, y AMLO gana las elecciones.

De ser así, ojalá mi sueño (este sí, despierto) se realice… y se desate el tigre… esperando que López Obrador, cumpla con su “amenaza” y no emprenda ninguna acción para retenerlo… sino todo lo contrario.
Ojalá, en esta ocasión, no se le ocurra inmovilizar una dinámica de movilización, como lo hizo con su plantón en Reforma, dos sexenios atrás.




No hay comentarios.: