Odio tener que tender
mi cama cada mañana al levantarme… indudablemente por flojera… pero más que
nada porque no encuentro ninguna razón para hacerlo.
¿Por qué no dejar la
ventana abierta todo el día (salvo cuando amenaza la lluvia o está ya se hizo
presente)… y la cama también?
¿Por qué?... por no
entrar en ningún pleito con Marina, a quien desde su niñez le dijeron que era
importante tender su cama al levantarse (su mama se la deshacía varias veces,
hasta que juzgaba que estaba bien hecha.)
A partir de este
sencillo e ¿insignificante o demasiado significativo? hecho… son innumerables
las implicaciones y significaciones de todo orden… sobre las cuales prefiero no
indagar ni encontrar explicaciones… dado que todas terminarían cuestionando mi
libre albedrío… y poner de manifiesto mi sumisión… al orden... sea este cual sea.
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